Paso 1
Aplícate todas las vacunas recomendadas, incluyendo la de la influenza y del COVID-19, para prevenir que tú y tus seres queridos se enfermen de gravedad. La vacuna de la influenza, la del COVID-19 y otras vacunas de rutina pueden reducir la probabilidad de enfermar gravemente; especialmente para aquellos que corren mayor riesgo, como niños pequeños, adultos mayores, personas inmunodeprimidas y embarazadas. Cuanto antes te pongas estas vacunas, más rápido adquirirás inmunidad y podrás contribuir a proteger a los demás.
Paso 2
Adopta medidas cotidianas de protección como cubrirte la boca y nariz al toser y estornudar (con un pañuelo), lavarte las manos con frecuencia y quedarte en casa cuando estés enfermo. Si te enfermas, toma medicamentos antivirales si tu doctor te los receta para que te sientas mejor, más rápido..
Paso 3
Habla con tu médico sobre tu riesgo o el de tu hijo de padecer un caso grave de VSR, de los beneficios potenciales de la vacuna contra el VSR y consulta si tu seguro cubre su costo. Los adultos mayores tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones serias a causa del VSR porque sus cuerpos se debilitan con la edad. Los adultos mayores con ciertas afecciones médicas pueden beneficiarse específicamente de la vacuna contra el VSR. Esta vacuna puede ayudar a proteger a los bebés menores de 8 meses y a otros niños pequeños de alto riesgo de la principal causa de hospitalizaciones en los Estados Unidos.
¿No tienes seguro médico? Puedes vacunarte a un precio reducido o sin costo con algunos proveedores médicos.
Encuentra lugares cercanos donde vacunar a tus hijos de forma gratuita. (Puede que algunos sitios cuenten con vacunas gratuitas o a bajo costo para adultos.)Datos importantes sobre los virus respiratorios
Las vacunas no solo te protegen a ti y a tus seres queridos. También pueden disminuir la saturación de trabajo para nuestros hospitales y personal de salud durante la temporada alta de virus respiratorios.